Cambios en el sector energético
Aunque el precio de la luz ha subido un 29% comparado con el mes de mayo, continúa a precios mínimos históricos y un 45% más barato con respecto a la media de los últimos 5 años. Estas bajadas de precio han sido derivadas también del confinamiento, que ha provocado que el consumo de energía haya caído por la paralización de las industrias, sobre todo, en el mes de abril. Pero, en los hogares, el efecto ha sido contrario; el consumo ha aumentado al teletrabajar y hacer un uso mayor de los electrodomésticos y, los consumidores, consecuentemente, han visto incrementadas sus facturas de luz.
En cuanto al gas, nos encontramos en la actualidad con altos niveles de stock, con una caída de la demanda de casi el 4% y con expectativas de recuperación en los mercados muy lentas.
Todo esto también ha originado algunos efectos positivos, como la disminución de la contaminación y el aumento de la producción de energías renovables, eólicas e hidráulicas principalmente, con unos precios, además, más bajos y accesibles. En mayo, mes en que iniciamos la desescalada, la producción de energías renovables ha crecido enormemente, cubriendo más del 50% de la demanda y favoreciendo la evolución hacia un sector más sostenible.
Aunque la desescalada está reactivando poco a poco la economía, la demanda de energía continúa baja y todavía lejos de la normalidad previa a la Covid-19.
Oportunidades para ahorrar en la factura eléctrica
Los usuarios del mercado regulado han podido disfrutar de un precio eléctrico más económico durante este periodo, pero, como citábamos con anterioridad, al subir el consumo en las viviendas, los importes totales de las facturas han crecido.
Los expertos aseguran que, conforme vaya recuperándose la actividad económica y la demanda global, los precios de la luz tenderán a subir y, con ello, también las facturas energéticas.
Actualmente, nos encontramos con una mayor competencia en el sector energético como consecuencia de esta crisis sanitaria y económica. Y las comercializadoras están dando la oportunidad a los usuarios de poder disfrutar de tarifas con precios más ajustados. Por eso, si queremos abaratar nuestras facturas, además de procurar hacer un consumo más eficiente, conviene comparar las distintas tarifas del mercado para encontrar la mejor oferta que se ajuste a nuestras necesidades de consumo.
Para ahorrarnos el tiempo de comparar precios entre las diversas compañías que existen hoy en día, podemos hacer uso de herramientas digitales que realizan esa tarea por nosotros de forma ágil. Como, por ejemplo, el comparador de tarifas de luz y gas de Watiofy que, con solo subir una foto de la factura a su web, calcula el consumo anual real del usuario, compara la tarifa actual con más de las 200 existentes en el mercado y recomienda la mejor tarifa, mostrando el ahorro anual que podría obtener. Todo este proceso lo realiza en solo unos segundos, gratis y sin ningún compromiso.
Watiofy destaca sobre otros comparadores por su especialización en el sector, que le permite ofrecer a sus usuarios un asesoramiento energético de calidad; resolviendo posibles dudas en las facturas, recomendando qué potencia contratar e, incluso, puede realizar el cambio de compañía directamente con la comercializadora si el usuario decide cambiar. Todo ello, también sin coste y sin sorpresas finales.
