Puede ser más o menos discutible lo oportuno o no de esconder en el propio hogar determinadas cantidades de dinero en metálico como fondo de emergencia. Pero independientemente de que haya quien se muestra favor y quiere encontrar, en ambos casos la duda sobre dónde esconder el dinero en casa es un motivo más que suficiente para plantearse la idea. Vamos a ver en este post algunos lugares donde tal vez esconder el dinero sea más seguro y práctico que en otros.
Generalmente en todos los planes de economía doméstica se recomienda incorporar un fondo de emergencia que, en caso de necesidad urgente no exija la contratación de productos de financiación que acarrearán costos añadidos. Depende mucho de quien elabora la previsión, pero generalmente se da por buena la cantidad equivalente a entre tres y seis meses de ingresos. Uno de los mayores problemas en este sentido sería el hecho de la necesidad de liquidez para este fondo, ya que si no pierde en buena manera el sentido.
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Pero no todos los productos de ahorro mantienen la misma posición de liquidez, e incluso en algunos casos en momentos concretos puede ser difícil liberar el dinero si nos hace falta puntualmente y con rapidez. Por ello son muchas las personas que no descartan utilizar su propio hogar como espacio para guardar todo el fondo o una parte. El dilema estriba como decíamos en la elección del lugar en el que va a descansar, la mayoría de los lugares que se nos ocurra a primera vista también se les van a ocurrir a los cacos, por eso conviene estrujarse un poco más el cerebro y dar con ideas diferentes, estas son algunas.
El recurso del manitas
Probablemente esta será una de las mejores ideas, pero, para ello hay que tener la mañana suficiente o un manitas de mucha confianza a quién recurrir. Realmente se trataría de construir una estructura común de la casa pero falsa. Puede ser un tubo de drenaje en el subsuelo, un retorno de ahí de la ventilación, una toma de electricidad en la pared, una moldura en el techo… todas estas piezas guardan apariencias de estar integradas en el conjunto de las estructuras del hogar y sin embargo son un escondite perfecto si están bien diseñadas y bien camufladas, difícil que el caco busque sino sabe lo que busca.
¿Por qué no fuera?
Si habían entrado a robar en nuestra casa lo razonable es pensar que es dentro de la casa donde va a buscar el dinero en metálico. Siguiendo este mismo razonamiento, si disponemos de algún espacio o terreno exterior, puede ser una idea perfecta no guardarlo dentro sino guardarlo fuera. Bien protegido y bien escondido, haría falta que el ladrón tuviera una pala y mucho tiempo para buscar en un jardín.
Disperso y camuflado
Esta es otra opción interesante si se hace bien. Consiste en dispersar el dinero de manera que si alguno de los escondites es encontrado puede generar la sensación al ladrón de haber dado con el botín. Aquí la inventiva es muy importante a la hora de buscar camuflaje para el dinero, desde el clásico libro vaciado, hasta los interiores de los palos de escoba huecos, las patas de la mesa huecas, barras de cortina, neumáticos de bicicleta… en general para rellenar sin doblar los billetes (que es lo interesante porque ocupa menos grosor) cualquier espacio cilíndrico hueco y con posibilidades de pasar inadvertido es una buena idea.
Durmiendo con peces
Más que una recomendación específica, que también puede llegar a serlo, se trata de un ejemplo de cómo el camuflaje de nuestro dinero en casa tiene que tener por un lado lo suficiente de inventiva, y por otro lo suficiente de lugar común que pase inadvertido. Es difícil que el fondo de un acuario con peces sea uno de los primeros lugares donde un ladrón va a buscar dinero o joyas, no es imposible, pero la lógica dice que buscará mucho más rápidamente en otros espacios de la casa, y habitualmente el modus operandi de estos ladrones no pasa por tener mucho tiempo, por lo que tratamos de dificultar que acaben encontrando nuestros escondites. Un buen camuflaje bajo el fondo de un acuario, obviamente lo suficientemente aislado para no perjudicar a los peces y no arruinar los billetes, puede ser una idea a tener en cuenta, pero sobre todo nos da una imagen de lo que queremos en relación a nuestro dinero oculto en el hogar.
La caja fuerte
Si tenemos el dinero suficiente para invertir en una buena caja fuerte, obviamente, esta es una elección acertada. No nos engañemos no hay un sistema perfecto, cualquiera de las ideas que hemos manejado aquí incluso esta, con tiempo y paciencia pueden ser transportadas por un ladrón profesional, pero, sin embargo, nos ofrecen valor inapreciable, el tiempo que los ladrones no suelen tener para cometer sus fechorías y que al final les puede hacer desistir de seguir tratándolo.
El problema fundamental de las cajas fuertes estriba en el hecho de su precio, obviamente no tenemos una caja que pueda ser transportada con facilidad, ni mucho menos una caja que no aporten medidas de seguridad fuertes, por tanto, aquí debemos prepararnos para una buena inversión.
Hombre, hay sitios mucho mas seguros para dejar el dinero o lo que quieras que debajo del colchon.
Hace poco me fije en un local que hay en mi barrio que no aparenta nada concreto y al escribir en google el nombre (grupoinviam) vi que se dedican a alquilar cajas de seguridad como la de los bancos. Tengo pendiente un dia de estos pasar por alli a informarme a ver que tal.
Otros buenos sitios dentro de casa: dentro de un pescado congelado de la nevera, en la cisterna del baño, en alguna chaqueta del armario…. lo malo, que como se te olvide la lias parda ja ja ja